miércoles, julio 01, 2009

Fin de la tortura.

Finalmente, después de un escabroso proceso de campañas electorales, estas afortunadamente llegan a su fin. Que campañas tan mas tontas y repetitivas, el mismísimo Dante se habría inspirado para crear uno de sus infiernos, donde te obligarían a escuchar a la niña decir de las distintas y particulares formas que gana la gente, al tata de las multitudes, al Sr. Rayito De Esperanza diciendo que no nos preocupemos, porque ya va a salvar a México –creo que ya esta ultimando detalles para ver de que calibre se va a pegar el plomazo-
Pero como no hay mal que dure cien años, ya llegamos al final de las campañas y del hartazgo.
Ya veré mi telenovela sin que me interrumpa el que se quedo sin chamba o la niña inocente…que bárbaro, o que la hacen hacer, el DIF o Derechos Humanos habrían de ver que pasa con esta niña, esos comerciales que la hacen hacer, poco les falta para que sean tipificados como abuso infantil, pero el gusto que me queda es que algún día crecerá, se dará cuenta de lo que fue su infancia y demandara a todos los Chuchos. (Chuchos que agarrense.)
De mientras, los mortales electores ya estaremos tranquilos.
Este arroz ya de coció y se quemo.
Descansaremos un poco hasta las próximas elecciones.