viernes, febrero 16, 2007

No fumo... gracias.

Hoy no escribire de politica ni nada de eso, comparto con ustedes un pequeño cuento que escribi hace un tiempo (cualquier semejanza con la realidad es mera coincidencia)


No gracias, no fumo, nunca me han gustado los taviros, es que cuando estaba mas morro le ponia al globo, y pos ya con un vicio tenia, ese lo agarre cuando estaba en Laredo, trabajaba de velador y pos pa no dormir me aventaba un globazo, entraba a la 1 de la tarde y salia a las 12 de la noche, me ponia un globo y me iba a dar la vuelta en LTD que tenia, después me dio por venderla, le vendia a batos, a doñitas bien, iban a dejar los morros a la escuela y le caian, cuando no traian lana soltaban, hasta morritas de la prepa iban a ponerle y pos me iba por ahí a rolar y agarrar el billete, después nos pusimos a hacer glass, n’ombre eso es bien peligroso, tiene que ser en un cuarto cerrado, que no entre nada de aire porque puede explotar, pero esa madre te deja mucha lana, si le metes 10 grandes sacas 40, ahí en Laredo conseguiamos todo, la efedrina que nos la vendia un doctor, el yodo, eso con lo que limpian las tuberías de las lecheras tambien, gasolina blanca, cemento y pos todo eso, yo me enseñe a cocinar luego luego, pero pos me ponia bien loco, a veces hasta una semana duraba sin dormir con eso, no Inge, si mucha gente se ha muerto poniendole a eso, yo pos le ponia pero comia mas o menos y tomaba mucho suero y de esos gueytores, pa no sentirme tan madreado, ya que le agarre la onda vendia de todo, por cierto el LTD me lo quito la placa porque me agarraron con dos kilos de mota, alla en Laredo estaba bien conectado, en una fiesta me presentaron una vez unos batos de la policia y un compa del ejercito, todo lo que decomisaban yo se los vendia y sacaba la mera cacharpa, si conociera gente de esa aca pos no anduviera en estos jales, ahí si que habia lana, pero pos me calme, si de milagro estoy vivo, una vez unos bajadores me pusieron una madriza y me dejaron por muerto en un basuron, una doñita que pasaba por ahí me dice que me vio porque me quejaba y fue por un hijo de ella y otra doña y me llevo pa su casa, me salve de milagro Inge, ahí habia muchos de esos perros hambreados si me encuentran me hacen giras, en la casa de la doñita estuve como seis meses, ya que me puse bien pues me fui de ahí, después volvi y le regale una feria, luego que volvi con mis compas creyeron que me habia venido yo pa aca, pero nel, casi no la cuento, cuando ya de al tiro me vine fue cuando un bato que me caia en la punta, cada rato nos iba a bajar la feria, iban el y otros batos, eran de la placa, nos bajaban cada rato, un dia llego el solo bien felon y pos yo andaba bien chiveado, el bato me quiso bajar y yo pensaba que me queria dar pa abajo porque luego luego saco el fierro, ya era muy noche, estábamos el y yo solos, y pos en un descuido que se dio, lo agarre con la pata de una mesa, de esas que vienen atornilladas, de esas de fierro pues, le di como 3 tubazos, y tiro la escopeta, entonces se la agarre, quiso sacar la de cargo y le acomode dos putazos, n’ombre ya no se levanto el bato, no traia chaleco, en caliente junte mis cosas y la escopeta y me fui en su patrulla lejos a un ranchito, ahí deje la patrulla y me fui a pata a otra parte, muy lejos, no le quite nada al bato porque luego quedan ahí las huellas de uno pues y luego por eso te buscan, ahí me quede un buen tiempo, ahí vi al bato en el periodico onde lo levantaron, pero pos fue por su culpa, yo nomas me defendi, luego pos ya me vine pa aca a trabajar, y pos me deje de eso. No fumo gracias.